Estafa de las cartas nigerianas

Que es la estafa nigeriana

   Hace pocos dias, hemos conocido el caso de tres personas de alrededor de los 70 años, que aparecieron muertas en su casa de Morata de Tajuña, en Madrid, victimas de un acreedor sin escrúpulos, que no dudó en matarlos ante la imposibilidad de sus victimas de pagarle. La deuda que las víctimas habían contraido en total era de alrededor de 400.000 euros, y fue motivada porque habían sido víctimas de una estafa llamada cartas nigerianas. Se llama nigeriana porque inicialmente venía de Nigeria, y se generalizó en los años 90 del siglo pasado. ¿En que consiste?

   El estafador se comunica con la víctima, por carta, correo electrónico, mensaje de texto, o redes sociales. Cualquier método es válido. El mensaje que transmite es que hay una cantidad de dinero muy importante, retenida en el pais, normalmente un pais conflictivo, en bancos, o herencias, y que no pueden disponer de el. Por eso necesitan la ayuda de las víctimas, para transferir el dinero a un lugar seguro, a cambio de que adelanten una cantidad que cuesta transferir ese dinero, y después, compartir con las víctimas el botín. La avaricia, hace que mucha gente, acabe "cazada", en el timo, y aporta las cantidades que le piden, con el convencimiento de que le van a ser devueltas con creces. La parafernalia que rodea toda esta trama, está cuidada al detalle; lleva un tiempo coger confianza con la víctima; mientras tanto se acompaña el timo, de fotografías de las personas supuestamente interesadas, de documentos pseudooficiales, como el sello de un organismo oficial del pais, o de un banco, incluso, se dan casos de verdadero amor por parte de la víctima como el caso del video a continuación; en fin, todo ello junto, hace que parezca real, y por desgracia, hay mucha gente que cae en la trampa. 

Tipos de estafas nigerianas

   Pero no solo existen este tipo de estafas, hay muchas variedades de este fraude, que entran dentro de la casuistica de las cartas nigerianas, veamos algunos:

• Estafas de empleo, dirigidas a personas en búsqueda de trabajo, y que después de haberles solicitado un pago previo al empleo, y en ocasiones haberlo recibido, desaparecen sin dejar rastro.

• Estafas de la lotería, que consiste en ganancias de lotería falsas, y que se prometen compartir, con la víctima, a cambio de datos personales, que luego se utilizan fraudulentamente, y algún dinero. 

• Ventas y alquileres en linea, consistente en la compraventa on line, por la que el estafador se pone en contacto con el vendedor de un bien, le paga con cheque falso con mas cantidad del precio,  a cambio de recuperar la diferencia, en efectivo. Si la víctima paga, cuando va a cobrar el cheque, se da cuenta del fraude, y ha perdido su dinero.

• Estafas de mascotas, normalmente de alto valor o escasas, que se venden por internet, y la persona que se interesa por ella, cae en el cebo, y paga un adelanto por una mascota inexistente.

• Estafa romántica, consistente en enamorar a la victima en una plataforma de contactos, y cuando ya se ha cogido confianza, sacarle el dinero con cualquier excusa, viajar a visitarle, estancias de hoteles, billetes de avión, gastos médicos por una enfermedad, etc...

   No solamente es el dinero, lo que se extrae a la víctima, también se roban datos personales, y eso también es peligroso, pues se pueden utilizar fraudulentamente para vaciarle las cuentas del banco, para suplantar la identidad de la víctima, o para venderlos al mejor postor...
Que hacer en estos casos

   Si recibes una carta o email con estas características, de alquien que te ofrece una suma importante de dinero, a cambio de una tasa, o un impuesto, o algo parecido, desconfía. Es posible que ya tengas confianza con esa persona, aun así, no envíes ningún dato personal a personas que no conoces, ni tampoco dinero, ni los datos de tus tarjetas de crédito, ni transferencias bancarias, ni al extranjero, ni ninguna cosa rara de esas; hay que desconfiar de todos, sobre todo si no se le conoce a esa persona, o solo a través de fotografías, o por internet, o redes sociales, o chat...

   Si tienes nombres de personas o instituciones o asociaciones, o direcciones de correo, busca en internet, y asegúrate de que existen. Comprueba, telefónicamente si es necesario, que esa persona existe y es quien dice ser. Y si no aparecen, desconfía. 

   Y sobre todo, piensa con la cabeza, no hay maneras rápidas de hacerse rico, si alguien te ofrece una, desconfía.

¡¡Hasta la próxima!!